Para los incondicionales de los perritos calientes un buen pan y una tradicional salchicha alemana de la mejor calidad, acompañada de ketchup y mostaza, es todo lo que se necesita para darse todo un homenaje gastronómico en forma de comida rápida. No seremos nosotros quienes pongamos en duda esta afirmación pues, de hecho, la compartimos al cien por cien. Pero, si queréis llevar vuestros hot dogs a un nivel superior o si, simplemente, os apetece innovar, os proponemos cinco sabrosísimos acompañamientos que harán que, literalmente, os chupéis los dedos.

1. Cebolla caramelizada

Si quieres un sencillo acompañamiento que convertirá tu perrito en una experiencia de sabor inigualable, apuesta por la cebolla caramelizada. El dulzor de ésta equilibra la salinidad de la salchicha, maridando a la perfección. Para prepararla necesitaremos 3 cebollas dulces, aceite de oliva virgen extra (AOVE), un chorrito de vinagre balsámico de Módena, un chorrito de agua y cinco cucharadas soperas de azúcar.

Elaboración: 

Cortamos la cebolla en juliana y la cocinamos tapada a fuego muy lento (nieve 2 de 10), en una sartén con un poco de AOVE y sal. Cuando la cebolla esté brillante y transparente, agregamos el azúcar y subimos el fuego, casi hasta el máximo, para caramelizarla. Removemos sin parar para que no se pegue y vaya cogiendo el color dorado. Es el momento de agregar el vinagre de Módena, que dará sabor y color a la cebolla. Si veis que se apelotona, agregáis un chorrito de agua. Cuando haya adquirido el tono caramelo deseado, retiramos y dejamos reposar unos minutos. Dejamos que escurra el aceite sobrante en un colador, esperamos a que se enfríe y la guardamos en un bote de cristal en la nevera, para utilizarla en el momento que la necesitemos.

2. Champiñones salteados

Otro acompañamiento sencillo y sano, que dará un plus de sabor a tus hot dogs. Para prepararlos necesitaremos 400 g de champiñones, un puñado de cilantro o perejil (según el gusto), 1/4 de cebolla, 2 dientes de ajo, 1 chile jalapeño, AOVE, sal y pimienta.

Elaboración:

Pelamos y cortamos la cebolla y el ajo muy finamente. lavamos y cortamos el chile y el cilantro en tiras delgadas. Limpiamos los champiñones bajo el chorro y los secamos con un paño. Los cortamos en láminas. 

En una sartén con AOVE, rehogamos el ajo y la cebolla durante tres minutos. Incorporamos al sofrito el cilantro y el chile y removemos. Agregamos inmediatamente los champiñones y movemos con cuidado para que no se rompan. Cocemos durante unos 10 minutos y salpimentamos. Retiramos del fuego y extendemos una pequeña cantidad por encima de la salchicha antes de cerrar nuestro perrito.

3. Guacamole

Es el mejor acompañamiento para convertir nuestro perrito caliente en un hot dog tex-mex. Para elaborarlo necesitaremos 2 aguacates, 1 tomate, 1 cebolleta, el zumo de una lima (o medio limón si no tienes lima), jalapeños o chile serrano y cilantro fresco.

Elaboración:

Pelamos los aguacates y extraemos la carne. Ponemos en un bol y aplastamos con un tenedor. Pelamos la cebolleta, la picamos bien y la agregamos al bol. Limpiamos el tomate y lo cortamos muy pequeño. Agregamos al bol junto con el zumo de lima. Picamos también el cilantro y los chiles (cantidad al gusto) e incorporamos a la mezcla. Removemos con cuidado. La idea es que no quede un puré fino, sino que esté integrado pero con algún tropezón. Agregamos a nuestro perrito y ¡a disfrutar!

4. Ensalada de col

Éste es uno de los acompañamientos más habituales en la tradicional cocina norteamericana. En este caso no se introduce en el perrito, sino que la servimos a parte a un lado del plato o en un pequeño bol. Para prepararla necesitaremos medio repollo, 2 zanahorias, 2 cucharadas de mayonesa, 2 cucharadas de crema agria, una cucharadita de mostaza y sal.

Elaboración: 

Limpiamos y pelamos las zanahorias y la col. Picamos ésta última en tiras finas y rallamos la zanahoria. Disponemos en un bol. Agregamos la mayonesa, la crema agria y la mostaza y rectificamos de sal. Removemos cuidadosamente y reservamos en la nevera hasta el momento de comerla.

5. Salsa barbacoa

Y te preguntarás: ¿salsa barbacoa? ¿Pero si es tan fácil como comprarla en cualquier supermercado? Y tienes toda la razón, pero si quieres probar una salsa que convierta tu perrito en una auténtica y deliciosa explosión de sabor, atrévete a prepararla tú mismo. Para ello necesitaremos 250 g de cebolleta, 100 ml de AOVE, 3 cucharadas de salsa Perrins o Worcestershire, 2 cucharadas de salsa de soja, 4 cucharaditas de vinagre de uva o manzana, 3 cucharadas de ketchup, 1 cucharadita de mostaza en grano, 2 cucharadas colmadas de miel, 1 cucharadita de pimentón de la Vera, 250 ml de salsa de tomate frito, 1/2 cucharadita de orégano seco, 50 a 100 ml de agua (dependiendo de cómo la queramos de espesa), sal (mejor ahumada) y pimienta negra recién molida.

Elaboración:

Cortamos la cebolleta muy fina y la sofreímos en un cazuela grande con un buen chorro de AOVE,  durante 5 minutos. Apagamos el fuego y agregamos todas las salsas, el vinagre, la miel, la mostaza y el ketchup. Removemos bien hasta que se integren todos los sabores.

Ponemos la cazuela de nuevo a fuego bajo y añadimos el tomate frito, el agua, el pimentón, el orégano, la sal y la pimienta. Cocinamos durante unos 5 minutos más. Cuando comience a espesar, le damos un toque con la batidora para conseguir una salsa homogénea y de sabor concentrado. Dejamos espesar hasta que tenga la textura deseada y rectificamos de sal. Si os gusta picante, añadimos un poco de cayena o guindilla en polvo al gusto. Dejamos repostar y reservamos.