Cinco recetas para un Halloween terroríficamente delicioso

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Cinco recetas para un Halloween terroríficamente delicioso

A tan solo unos días de la noche más terrorífica del año, pocos son los que todavía no saben de qué personaje se van a disfrazar o disfrazarán a sus hijos, a qué fiesta acudirán o qué dulces repartirán entre los más pequeños. Seguro que también son muchos los que prefieren celebrar este Halloween en casa y precisamente a ellos dedicamos este post en el que os damos algunas ideas para preparar una “espeluznante” cena, que hará las delicias tanto de niños como de mayores. Además, son una perfecta excusa para pasar una divertida tarde en familia, preparando estas recetas tan fáciles, como divertidas y riquísimas.

1. Pastel de calabaza de Halloween

La calabaza es, sin duda, la estrella de esta celebración y no puede faltar en tu mesa. Con este pastel triunfarás seguro.

Ingredientes: 3 huevos medianos; 45 g de harina de arroz; 45 g de fécula de maíz; 90 gramos de azúcar; 1 cucharadita de esencia de vainilla; 1 cucharadita de levadura en polvo; 100 g de chocolate blanco; 250 ml de nata para postres; 5 galletas oreo; 500 g de fondant de naranja; 100 g de pasta de azúcar negra.

Para la preparación, batimos los huevos con el azúcar hasta conseguir una textura espumosa. Añadimos la maicena, la harina de arroz y el polvo de hornear tamizado.

Agregamos la esencia de vainilla y mezclamos hasta conseguir que se integre todo y no queden grumos.

Vertemos la mezcla en un molde forrado con papel pergamino y horneamos a 170 grados durante 35 minutos. Retiramos del horno y dejamos que se enfríe.

Mientras tanto, preparamos la mousse de Oreo troceando las galletas. Montamos la nata (reservando un poco) y añadimos el chocolate fundido y las galletas troceadas. Mezclamos suavemente con movimientos envolventes.

Dividimos el bizcocho en 2 discos y lo rellanamos con la mousse. Cubrimos con el segundo disco y glaseamos con la nata montada.

En una tabla, extendemos la pasta de azúcar naranja y cubrimos la tarta haciendo que se adhiera bien a los bordes. Retiramos las partes que sobran.

Con un cuchillo hacemos ligeros cortes en la superficie con los que dibujaremos una calabaza. Con el fondant negro y utilizando una brocha ligeramente húmeda, dibujamos la boca, nariz y ojos.

2. Momias de salchicha

Estas terroríficas momias pueden ser el aperitivo perfecto, un entrante e incluso una cena deliciosa.

Para su preparación necesitaremos una plancha de masa de hojaldre, empanada o pizzas, según la que más os guste; ocho salchichas (vuestras preferidas: Bratwurst, Frankfurt e incluso butifarra o longaniza fresca), mostaza, ketchup o mayonesa.

Comenzamos la elaboración precalentando el horno a 180 grados. Estiramos la masa sobre una mesa con un poco de harina y cortamos en tiras de 1 cm, aproximadamente.

Envolvemos cada salchicha con esas tiras, dejando un hueco que será la cara de las momias. Colocamos las momias sobre una bandeja de horno, forrada con papel de hornear y cocinamos a 200 grados durante 13 o 15 minutos, en la bandeja del medio, con temperatura abajo y arriba y aire.

Sacamos del horno y dejamos que se enfríen unos minutos para que la masa se endurezca. Utilizamos la mostaza, el kétchup y la mayonesa para dibujar la cara y ensangrentar a nuestras momias.

3. Cerebro de Halloween

La base de esta sencillísima y terrorífica receta es el típico postre italiano panna cotta.

Para prepararlo necesitaremos: 200 ml de nata para postres; 50 g de azúcar; 3 g de cola de pescado; 1 pizca de vainilla y 50 ml de guindas en almíbar.

Preparación: Vertemos en un cazo la nata, el azúcar y la vainilla y dejamos que cueza a fuego lento durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando. Añadimos la gelatina escurrida, previamente reblandecida en agua fría durante 10 minutos. Removemos hasta que la gelatina quede totalmente integrada, vertemos en un molde y refrigeramos hasta que se endurezca.

Cuando la panna cotta esté completamente sólida, le damos la vuelta al plato. Moldeamos la pana cotta dándole forma ovalada. Hacemos un corte en el centro formando dos hemisferios.

Con un palillo dibujamos los surcos típicos del cerebro y a continuación vertemos el jarabe de cereza negra sobre la panna cotta. Guardamos en el frigorífico y servimos justo antes de degustarlo.

4. Pizza arácnida

Pocos niños se resisten a la pizza y si además la convertimos en una temible araña, se convierte en el plato ideal para celebrar Halloween.

Para prepararla necesitaremos 400 g de harina; 15 g de levadura; 200 ml de agua; 2 cucharadas de aceite de oliva; una pizca de sal y harina, para la masa. Para cubrir la pizza necesitaremos tomate frito; queso parmesano; pepperoni; aceitunas negras y verdes y orégano.

Iniciamos la receta poniendo la harina en un bol, junto con la levadura y la sal. Hacemos un hueco en el centro y agregamos el agua y el aceite de oliva. Amasamos bien y dejamos reposar unos minutos.

Espolvoreamos la encimera con harina para que la masa no se pegue y con la ayuda de un rodillo estiramos hasta que quede del grosor que más os guste. Cubrimos con el tomate frito y espolvoreamos con el queso rallado.

Colocamos las rodajas de pepperoni y con los recortes de masa que nos han sobrado de hacer la base de la pizza, hacemos canutillos que colocaremos alrededor de la pizza como si fueran las patas de la araña. Horneamos durante 15 minutos a 200 grados. Adornamos con las aceitunas y ¡a disfrutar!

5. Fantasmas de plátano

Esta receta es tan sencilla y divertida que tus hijos pueden prepararla sin apenas ayuda.

Para hacer nuestros fantasmas necesitaremos: 4 plátanos; 8 palitos de helado; chocolate blanco y chocolate negro para fundir.

Comenzamos la elaboración cortando los plátanos en dos (si son muy grandes puedes hacer tres trozos). Los pinchamos con los palitos por la parte más plana por la que los hemos cortado. Los sumergimos en el chocolate blanco y los dejamos enfriar en el frigorífico hasta que el chocolate esté duro. Extraemos de la nevera y pintamos los ojos y la boca con chocolate negro. Si quieres que los fantasmitas sean todavía más temibles, puedes utilizar mermelada de fresa para mancharlos de sangre.

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