Hoy volvemos con un post con un poco de historia gastronómica. Y es que en esta ocasión vamos a contártelo todo sobre las salchichas alemanas Bockwurst. Hablaremos de origen, composición y los mejores acompañamientos para que prepares platos absolutamente deliciosos y con ese toque germánico que tanto nos gusta. ¿Quieres acompañarnos en este viaje para el paladar? ¡Sigue leyendo tras el salto!

Del mismo modo que ocurría con las salchichas Bratwurst, de las que ya te hablamos en este post de hace algunas semanas, las Bockwurst también son una parte fundamental si hablamos de la dieta tradicional alemana. Están elaboradas con carne de cero, vaca, pollo o pavo muy fina, aderezada con sal, pimentón y pimienta blanca. Y mucha atención a esto, porque en algunas regiones se llega a utilizar la carne de pescado como relleno. Las salchichas alemanas Bockwurst -tal y como entendemos el término en español- son de las más gruesas y se suelen cocer antes de comerlas.

Se trata de una salchicha a la que también se la conoce como Knobländer o Brühpolnische en Alemania y que habitualmente se sirve con una cerveza del tipo Bockbier. Forma parte de las llamadas Brühwurst (Salchicha escaldada), en contraposición a las Bratwurst.

Para hacer un poco de historia, debes saber también estos datos: la creación de esta salchicha data del año 1893 y es obra del restaurador berlinés Robert Scholtz y del carnicero Benjamin Lowenthal. El primero la sirvió por primera vez en su pub (Kneipe) de la calle Skalitzer 46 B (esquina con Wendenstraße).

Y terminamos recordándote que, de nuevo del mismo modo que sucedía con nuestra Bratwurst, la elaboración de nuestras salchichas alemanas Bratwurst Picken con Ternera fue un secreto guardado por los maestros charcuteros alemanes durante generaciones. Sabores únicos que convierten cualquier comida en un auténtico placer.  ¡Deliciosas!