Si el picoteo es peligroso todo el año, durante el verano, cuando disponemos de largas jornadas de asueto, se puede convertir en una inevitable tentación. Todo un placer que nos puede dar más de un disgusto en forma de algún Kilillo de más o de subidas nada deseadas del azúcar o el colesterol. Un problema que podemos evitar si restringimos los alimentos poco saludables y los sustituimos por snacks sanos y naturales.
Y sí ¡estos snacks también pueden ser deliciosos! Si sigues leyendo, descubrirás que el placer gastronómico no está reñido con una alimentación saludable y equilibrada. Prueba de ello los snacks que te proponemos a continuación.
Nada más natural y nuestro que las aceitunas rellenas de anchoa. El típico aperitivo que evita los ultraprocesados y es el compañero perfecto de nuestra bebida preferida (si es sin alcohol mucho mejor). Las aceitunas no solo nos aportan grasas saludables, sino que también son ricas en probióticos naturales, hierro, magnesio, potasio, yodo, calcio y antioxidantes.
Si a todas estas bondades sumamos que las anchoas son muy ricas en ácidos grasos omega-3, proteínas y vitaminas, éste es uno de los snacks más sanos, nutritivos y deliciosos que podemos encontrar.
Fuente inagotable de minerales, magnesio, fósforo, potasio, calcio, hierro y oligoelementos como el selenio y el zinc, los frutos secos son, además, uno de los mejores antioxidantes que podemos encontrar. Beneficios a los que se suman grandes cantidades de fibra, vitaminas, proteínas vegetales y grasas saludables. Por todo ello, almendras, pistachos, nueces, cacahuetes o anacardos pueden ser tu aperitivo perfecto. Eso sí, no debemos olvidar que también tienen muchas calorías y por tanto, debemos consumirlos con moderación.
Éstas requieren de un minúsculo esfuerzo de tu parte. Obviamente es más fácil recurrir a las palomitas de microondas pero, si las haces tú mismo, tu salud y tu línea te lo agradecerán.
Para elaborarlas solo necesitamos 70 g de maíz en grano para palomitas, aceite de girasol u oliva (según tu gusto) y sal.
Cubrimos el fondo de una sartén con aceite y lo ponemos a fuego alto. Cuando esté caliente, vamos agregando los granos de maíz en una sola capa y tapamos, dejando un pequeño hueco para que salga el vapor. Cuando comiencen a explotar las primeras palomitas, bajaremos el fuego a nivel medio y esperaremos a que dejen de oírse las explosiones. Apagamos el fuego, destapamos y ¡a disfrutar!
Si dispones de 10 minutos, esta receta puede convertirse en la estrella de tus picoteos veraniegos. Para prepararlo necesitarás 400 g de garbanzos cocidos, 6 u 8 zanahorias, 4 cucharadas de tahini (pasta de sésamo), ajo ( 1 o 1/2 según tu gusto), zumo de limón, 1 cucharadita rasa de pimentón (dulce, picante o mezclado, según tus preferencias), 1/2 cucharadita de semillas de hinojo, aceite de oliva virgen extra (AOVE), sésamo tostado y sal.
La elaboración es tan sencilla como poner todos los ingredientes, salvo la zanahoria, en un vaso de batidora o robot de cocina y batir bien hasta que quede una crema densa. Servimos en un bol, regamos con un chorrito de AOVE, espolvoreamos con pimentón y acompañamos con palitos de zanahoria. También puedes utilizar palitos de pepino, apio o pepino.
Esta preparación, super saludable y nutritiva, es perfecta para comidas de picoteo o aperitivos. Para elaborarla necesitarás 4 lonchas grandes de salmón ahumado (300 g), 2 aguacates, 1 cebolleta pequeña, 1 tomate pequeño, 1 cucharada de zumo de limón, sal y perejil.
Para preparar el relleno, pelamos la cebolleta y el tomate, los cortamos a daditos y los ponemos en un bol no demasiado grande.
Cortamos los aguacates por la mitad, retiramos los huesos y sacamos la pulpa con una cuchara. Reservamos medio aguacate y picamos el resto. Agregamos al bol de la cebolleta y el tomate.
Sazonamos con un buen chorro de limón y con un tenedor mezclamos bien hasta conseguir una pasta. Cortamos el medio aguacate restante en 8 gajos finos y los reservamos.
Extendemos un trozo de papel film transparente grande sobre una superficie plana y disponemos sobre él una loncha de salmón ahumado. Cubrimos con la pasta de aguacate, tomate y cebolleta. Encima colocamos 2 gajos de aguacate y enrollamos, ayudándonos del papel film. Repetimos el proceso con cada loncha de salmón, dejamos reposar en el frigorífico, para que se endurezcan un poco y emplatamos. Decoramos con unas hojas de perejil.
Si eres de los que entre horas te apetece un dulce, nada mejor que un buen helado y si, además, no contiene azúcares ni grasas mejor que mejor. ¿Que no crees que sea posible? Pues apunta esta sencillísima receta.
Solo necesitas tres o cuatro plátanos maduros, cacao desgrasado en polvo (3 o 4 cucharadas según te guste más o menos fuerte) y un chorrito de la leche animal o vegetal que suelas tomar.
Pelas los plátanos, los troceas y los introduces en el vaso de la batidora. Agregas el cacao y la leche, bates bien, hasta obtener una crema muy suave e introduces en el congelador durante unas 3 horas, removiéndolo de vez en cuando.
Esta receta también puedes degustarla como una deliciosa crema de chocolate, sustituyendo el congelador por una o dos horas de nevera.
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