A tan solo unos días de la noche más terrorífica del año, seguro que ya tienes todo listo para sorprender con tu disfraz o decorar tu casa para que no haya quien te visite y no sienta auténtico pavor. Pero ¿con qué “manjares” atemorizarás a tus atrevidos comensales? Si estáis hartos de vaciar calabazas o de recurrir a dulces o comidas preparadas para la ocasión, os proponemos algunas de las mejores y más sencillas recetas para que, tanto niños como mayores, se chupen sus “ensangrentados” dedos con tu menú de Halloween.

Dedos de bruja

Y hablando de dedos terroríficos, qué mejor que sorprender a tus invitados con esta versión de finges de pollo especiales para Halloween. Para prepararlos necesitaremos 2 pechugas de pollo, 100 g de copos de maíz tostados, 100 g de harina, 2 huevos batidos, Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE), Ketchup, aceitunas negras sin hueso, sal y pimienta.

Elaboración:

Cortamos las pechugas en tiras que salpimentaremos y enharinaremos ligeramente. Las pasamos por el huevo batido y después por los copos de maíz tostados, que habremos triturado un poco con las manos.

Las freímos en abundante AOVE, bien caliente, hasta que estén doradas. Retiramos y dejamos que se templen sobre papel de cocina o papel absorbente.

Emplatamos en una fuente, poniendo en un extremo de cada dedo un poco de ketchup y encima media aceituna negra, a modo de uña.

Ojos terroríficos

Si se atreven a echárselos a la boca, seguro que tus temerosos comensales no se arrepentirán. Para preparar cuatro unidades de esta riquísima y terrorífica receta necesitaremos 2 huevos cocidos, 2 cucharadas de mayonesa, 1 aceituna negra, 1 pimiento del piquillo, unas gotas de tabasco y un poco de cebollino.

Elaboración:

Partimos los huevos por la mitad y separamos las yemas de las claras. Reservamos éstas últimas y mezclamos las yemas con las dos cucharadas de mayonesa, un poco de cebollino picado, ketchup y unas gotas de tabasco.

Rellenamos los huevos con la masa anterior y los disponemos en una fuente. A modo de iris de nuestros ojos colocamos en el centro una rodaja de aceituna negra y decoramos con tiras de pimiento del piquillo y chorros de ketchup simulando la sangre.

Momias de hojaldre

Deliciosas y temibles a partes iguales, estas momias de hojaldre harán las delicias de los más pequeños. Para elaborarlas necesitaremos 1 placa de hojaldre, 4 salchichas de Frankfurt, 1 huevo batido, 1 cucharadita de mayonesa y una aceituna negra sin hueso.

Elaboración:

Cortamos en tiras la placa de hojaldre y con ellas envolvemos nuestras 4 salchichas de Frankfurt, dejando un extremo sin tapar con la masa. Pintamos con el huevo batido y las horneemos durante 20 minutos, a 200 grados, con calor arriba y abajo.

Retiramos del horno y decoramos pintando el cuerpo con una ligera capa de mayonesa e incrustando dos trocitos de aceituna negra a modo de ojos en la parte que hemos dejado destapada.

Con tomate frito o ketchup rociamos nuestras momias para que parezcan ensangrentadas.

Galletas vampiro

Si hay un rey en la noche más terrorífica ese es, sin duda, el vampiro. Para que no falte en tu mesa de Halloween, te proponemos esta receta de galletas que atemorizarán y deleitarán a tus invitados. Para elaborarlas necesitaremos 80 g de mantequilla, 2 huevos medianos, 100 g azúcar, 200 g de harina, 1 cucharadita de levadura en polvo, 1 pizca de sal, 1 cucharada de extracto de vainilla y 200 g de chips de chocolate.

Para la decoración necesitaremos 120 g de crema pastelera o crema de avellanas blanca, sirope de fresa y nubes de azúcar en miniatura.

Elaboración:

Precalentamos el horno a 190 grados con calor arriba y abajo.

En un cuenco ponemos la mantequilla blanda y el azúcar e integramos bien con una espátula. Vertemos los huevos batidos y la vainilla y seguimos mezclando, hasta tener una masa suave y sin grumos. Incorporamos la harina y la levadura tamizadas y mezclamos, agregamos un poco de sal y seguimos mezclando, hasta conseguir una masa pegajosa. Por último, añadimos las pepitas de chocolate e incorporamos bien.

Preparamos una bandeja de horno con papel de hornear y disponemos sobre él pequeñas bolitas, que aplanaremos ligeramente con las manos. No olvidéis dejar separación entre las bolitas para que n se peguen al expandirse en el horno. Cocinamos durante 8 minutos. Retiramos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Para la decoración, añadimos el colorante rojo a la crema pastelera o la crema de avellana y mezclamos hasta conseguir el tono deseado. Cuando las galletas estén frías, las cortamos por la mitad, untamos en una de las mitades con abundante crema, tapamos con la otra mitad e incrustamos las mini nubes a modo de dientes. Con el sirope de fresa “ensangrentamos” los dientes y ¡a disfrutar!